¡Vive!
Nos encontramos ante un poemario que dibuja con maestría la belleza de lo cotidiano, otorgando protagonismo a esas pequeñas cosas, y a esos pequeños grandes sentimientos que muchas veces por las prisas de los tiempos que vivimos no queremos o no sabemos ver.
Poemas sencillos a simple vista pero con una carga conceptual vital.
Virginia Romo, nos abre una ventana a su alma, a sus desvelos, alegrías y llantos. A su parcela más personal a golpe de versos y buena poesía.
Una pequeña joya que brilla con luz propia por su sencillez y apabullante honestidad.