Año 1979. Antonio Navarro trata de recomponer su
vida fuera del Ejército español y repudiado por su
familia junto a un Miguel Fernández-Piedecasas solo y
desbordado por las adicciones de Daniela y al grupo
punk Rateros cada vez más famosos y despuntando
en la capital madrileña.
Mientras, la familia Navarro Osuna, dividida y desolada
por una repentina pérdida, recibe una misteriosa carta
que destapa un pasado desconocido y oculto durante
años que sacudirá los ya maltrechos cimientos sobre
los que se asentaba la pequeña unidad familiar. Un
pasado que les unirá irremediablemente a la familia
Fernández-Piedecasas de una forma que ninguno
podría imaginar.