Guadalupe Molina articula en esta investigación ejes complejos: escuela secundaria, adolescentes–jóvenes, género y sexualidad. Problemáticas que pone en diálogo a partir de la pregunta por los modos de hacer género entre estudiantes. El enfoque teórico-metodológico que ordena la indagación es el socioantropológico y su resultado es una etnografía escolar.