Ariel Williams nos propone, y nos ha propuesto a lo largo de los años, un mapa en el que los lectores deambulamos de un punto hacia otro construyendo sentidos. Esta antología seleccionada por el autor y por Marcelo Daniel Díaz resulta un registro de cómo la poesía trabaja de manera silenciosa a modo de susurros y de a poco adquiere dimensión y termina cargada de intensidad y belleza.