El libro trata sobre disputas culturales en el campo (de batalla) visual, sobre conflictos y tensiones que atraviesan nuestro imaginario. Sergio Caggiano analiza cómo, a través de los repertorios usados y de las selecciones que recortan, muestran y dejan de mostrar imágenes, los actores sociales y políticos se ubican y actúan en los escenarios donde se disputa el poder.