Las fronteras más duras de los Estados no son siempre las geográficas. Mario abandona Barcelona en busca de un cambio que solo puede ofrecerle Nueva York. Pero trabajar de ilegal, y lo que ello conlleva, le hará vivir la ciudad de un modo diferente. Ni mejor, ni peor.
En fragmentos con leves guiños a las fechas, camina por calles y pensamientos donde entran Melville y Chomsky, otros inmigrantes en peores circunstancias, lecturas varias, la independencia de Cataluña, una estatua de Lenin en Estados Unidos, el FBI investigando un crimen, o el regreso a casa en un barco mercante. 'Brooklyn, después de todo' es el paisaje de una generación decepcionada, y sin embargo, a la expectativa de todo.