Vivo mi vida normalmente: soporto a mi familia, el colegio y a mi mejor amiga. Todo esto lo escribo en diarios que he ido acumulando con el tiempo. Hace poco encontré mis diarios de cuando tenía 12 años y decidí editarlos y compartirlos con ustedes. A esa edad pasan muchas cosas pero nada como lo que voy a contarles. Ese año llegó Nadia al colegio, una chica que gustaba de ir con un ojo tapado. Por curiosidad, terminé en su casa donde me prestó un libro que me llevó a enfrentar una extraña aventura. Fantasmas, encuentros cercanos con la muerte y la vida escolar se volvió mi diario vivir. Nuevos desafíos, muchas locuras y, lo mejor, nuevas amigas. Desde ese año mi vida nunca fue la misma. ¿Me acompañan en esta historia?