Dos palabras que exciten la tensión estética del lector pueden ser mucho más valiosas que setecientas páginas de una narración convencional. Es así que _Mucho ruido_ ofrece un conjunto de cuentos con veleidades hacia lo abstracto o, al menos, alegórico, donde circunstancias incorpóreas, como los sueños, los traumas, los agujeros negros e incluso la Muerte, son personajes que van del bracete con total naturalidad junto a otros de carne y hueso. Lo abstracto es, pues, una de las características principales de este libro junto a otra coordenada importante, como es el absurdo, a lo que se añade un cierto aliño de humor en la mayoría de los casos.
Por lo tanto, no hallará aquí el lector relatos entendidos como historias pequeñitas o novelas en miniatura, sino textos breves con su propia identidad y aspiraciones a descubrir el humor de la metafísica o la metafísica del humor.