Solemos creer en las noticias de los medios masivos mientras dudamos de la Palabra de Dios, aún sabiendo que muchas noticias responden a intereses creados y no son toda la verdad. Lo que hoy es novedad y aparenta ser veraz, mañana podría ser una mentira ridícula.
En cambio la Palabra de Dios es inmutable y poderosa, capaz de cambiar realidades, mudar temporadas y cambiar el destino eterno. La Palabra de Dios contiene promesas de provisión y bienestar, presencia y bendición, protección y cuidado. Podemos estar seguros de que nuestras oraciones son escuchadas y que Dios nos ayudará en tiempos de necesidad pues la Palabra de Dios contiene promesas de cobertura espiritual, salud, salvación y perdón de los pecados. Además, nos alienta con hermosas promesas de paz y cuantiosas promesas para tomar buenas decisiones.
Si Dios lo promete, Dios lo cumple es una bella manera de hacer tangible el poder de la Palabra Escrita y vigorizar la fe por medio de las verdades eternas.