“Tarros de miel” es la historia de Lunático, un joven que tiene que afrontar la ruptura traumática con su novia. En este viaje que vivimos a través de una serie de pasajes y vivencias en diferentes veranos posteriores a la ruptura, vemos como nuestro protagonista no solo evolucionará en su desasosiego interno sino también en su forma de pensar y actuar.
En estos relatos descubrimos como Lunático acaba en situaciones festivas, eróticas y un poco degeneradas, a veces con intención y en otras sin pretenderlo, todo esto fruto de su necesidad de sentir cualquier cosa que le haga olvidar el dolor que siente.
Hay relaciones, personas y emociones que se nos quedan incrustadas tan profundamente que es complicado superarlas, en ocasiones nunca conseguimos hacerlo del todo y a esta situación es a la que se enfrenta nuestro protagonista.
Sin pretensiones, con el simple objetivo de entretener y, en algunos momentos, divertir, “Tarros de miel” se narra en primera persona, con un ritmo _adrenalítico_ y unos diálogos frescos y extensos, porque si por algo se caracteriza Lunático es por su diarrea verbal.