El género literario más recurrido para narrar el presente en tiempos de declinación de todo orden simbólico, incertidumbre y experiencia anticipada de catástrofe es la distopía.
Maximiliano Gomez, sin concesiones, denuncia la falsa utopía capitalista y tecnológica que, en realidad, se desvanece como un castillo excrementicio, en época de cataclismo social y cultural. Ya Fellini había anticipado lo que vendría cuando expresó «La televisión es el espejo donde se refleja la derrota de todo nuestro sistema cultural». Una derrota dentro de la cual corre la sangre de los siempre olvidados.
Alejandro Modarelli