La creatividad y la imaginación provocada por las experiencias eróticas no tiene límites: primeras veces después de tantas veces, apodos y sobrenombres que solo podrían nacer del deseo, la represión y sus consecuencias desbordantes, poesías sensoriales, recuerdos regalados, encuentros con aires diplomáticos, batallas entre polvos blancos. Historias de reconciliaciones, la común insatisfacción femenina, fantasías y vergüenzas masculinas, perspectivas joviales y miradas maduras, placeres dolorosos de los cuales algunos afirman estar agradecidos. Esta colección se escribió sin represión.