Este libro agrupa una serie de reflexiones sobre la popularidad del arte moderno, presentadas en un encuentro mantenido en 1966 por la mejor crítica de arte italiana del momento. Alberto Cirese inicia la discusión planteando qué se entiende por “arte popular” y aclarando los términos y el desarrollo histórico de este concepto. A Cirese sigue Giulio Carlo Argan, que introduce la cuestión de manera más específica en lo que se refiere al arte moderno como arte popular. Argan identifica dos líneas fundamentales del debate, que serán desarrolladas en los capítulos siguientes: “Arquitectura” y “Diseño industrial”.